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Estudiantes extranjeros, los otros perjudicados por crisis de la Autónoma

La semana pasada tuvieron que hacer una colecta de alimentos para cuatro de ellos.

José Granados Fernández
@JoseGranadosF


En un callejón sin salida, viviendo la angustia de sus padres en sus países de origen, 19 estudiantes extranjeros esperan una pronta solución a la crisis financiera de la Universidad Autónoma, generada durante la investigada administración del exrector Ramsés Vargas Lamadrid.

De los 19 estudiantes en intercambio, 15 pagan su manutención, alojamiento y transporte. Las dificultades de este grupo tienen que ver, fundamentalmente, con la parálisis de las clases en las facultades en las que cursan su semestre, hecho que no es menos grave si se tiene en cuenta que están a punto de perder todo su esfuerzo personal y económico al venir a Barranquilla a estudiar durante seis meses.

Los cuatro estudiantes restantes, que tampoco están recibiendo clases, afrontan mayores dificultades. Se trata de dos mexicanos, un brasilero y un argentino becados por las facultades de Comunicación y Administración. En cumplimiento de este intercambio, cuatro alumnos de la Autónoma viajaron a México, Brasil y Argentina a estudiar en el presente semestre.

“A estos cuatro muchachos extranjeros no les están cumplido con la alimentación que la universidad debe darles”, confirmaron varias fuentes consultadas por Emisora Atlántico y Zona Cero.com.

De acuerdo con lo pactado entre las universidades que intervienen en el intercambio, la Autónoma debe entregarle 500 mil pesos mensuales a cada joven para sus gastos. En este momento ya le deben un millón de pesos a cada uno, equivalente a dos meses de manutención y transporte.

“Para comer, ellos han tenido que pedir ayuda a sus padres en México, Brasil y Argentina”, indicaron compañeros de clases que conocen de cerca el día a día de los extranjeros.

Si bien el alojamiento lo tienen asegurado en un apartamento de la Autónoma cerca a sus instalaciones en la carrera 46, hace poco les cortaron el agua. En ese momento, la universidad tuvo que “enviar a operarios de mantenimiento a reinstalarles el servicio de manera fraudulenta”.

Era tan apremiante la falta de alimentos que la semana pasada la Oficina de Relaciones Internacionales de la Autónoma, a cargo de Roxana Buitrago, convocó a sus empleados a una jornada de solidaridad para que colaboraran con productos para dárselos a los universitarios extranjeros. Pese a que no reciben pagos desde hace varios meses, los trabajadores de la Autónoma mostraron su lado solidario y donaron lo que pudieron para los jóvenes.

Buitrago dijo a Emisora Atlántico y Zona Cero.com que están haciendo “todo lo posible para resolver esta situación”. Aceptó que, como lo revelaron las fuentes consultadas, las universidades de los estudiantes extranjeros ya expresaron su preocupación por lo que sucede y su malestar lo expusieron ante la Asociación Colombiana de Universidades, Ascun.

Ninguno de los universitarios extranjeros aceptó referirse a lo que les sucede por temor a represalias, pese a que son víctimas, como los restantes 9.000 alumnos de la Autónoma, de la cuestionada administración de Ramsés Vargas Lamadrid, quien tuvo que dejar el cargo y es investigado por el Ministerio de Educación y la Fiscalía General de la Nación, junto con funcionarios y familiares suyos que siguen vinculados a la institución.

 

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